Este lunes 20 de abril, día en que se cumple el quinto aniversario de su primer debut por Antena 3, Vis a vis comienza su despedida definitiva. FOX, canal de pago en España, estrena Vis a vis: El oasis, la quinta y última («absolutamente la última», afirman sus creadores) temporada de esta serie de thriller que ya no será carcelario.

Cuando la ficción producida por Globomedia (The Mediapro Studio) se estrenó en TV abierta en 2015, iniciaba un camino de no retorno. Es que Vis a vis logró dar pasos fundamentales para la edad de oro que comenzaba a vivir la ficción televisiva española.

El principal fue el riesgo. La apuesta por emitir en prime time de una cadena abierta un thriller premium de alto voltaje, centrado en mujeres reclusas, que abordaba temas como la homosexualidad femenina y gitana, no tenía antecedentes en España.

También fue único el vínculo que logró la ficción con su audiencia en las redes sociales. La «Marea Amarilla», como se autodenominó la legión de fans de Vis a vis, fue tan demandante, que consiguió revivir la serie dos veces.

Justamente, cuando en 2018 Atresmedia decidió que Vis a vis ya no tenía cabida en Antena 3, FOX Network Group apostó por satisfacer a su público y continuar la producción. Y ese modelo de dar una nueva vida a series en la TV de pago o por suscripción –que Atresmedia había testado meses antes con Velvet en Movistar+ y luego siguió con La casa de papel en Netflix- quedará en la historia televisiva cuando se estudie el cambio de paradigma en el consumo y producción audiovisual de estos últimos años.

La proyección internacional es otro de los terrenos donde Vis a vis fue protagonista. La serie está entre esas primeras que lograron romper la barrera España-América Latina. Junto con otras como Gran Hotel, Merlí o El Ministerio del Tiempo, demostraron que del otro lado del Atlántico sí existía interés por la ficción made in Spain.

Además, Vis a vis tiene en su historia otros méritos fuera de casa, como ser la primera serie española en emitirse en abierto en el Reino Unido (por Channel 4), la primera en llegar a Amazon Prime en EEUU o la primera en verse en Hulu Japón.

Para repasar este fenómeno y adelantar lo que viene, ttvOriginals tuvo un encuentro virtual con Iván Escobar (IE), creador, productor ejecutivo y showrunner, y Sandra Gallego (SG), directora y coproductora ejecutiva, previo al lanzamiento de Vis a vis: El oasis.

Vis a vis hizo historia en muchos sentidos. ¿Podríamos decir que sin ella no existiría La casa de papel?

IE: Los dos creadores de La casa de papel, Álex Pina y Esther Martínez Lobato, fueron dos de los creadores de Vis a vis. Así que hay una especie de vínculo umbilical, casi metafórico, que siempre estará ahí.

Recuerdo cuando llegamos con Vis a vis a Antena 3, con Sonia Martínez que fue la valedora de esta serie; llevamos unos documentales extraños de presas que miraban a cámara, era un entorno extraño, unos monos amarillos, unas tramas duras… Y cuando años más tarde pasamos a FOX, una cadena cerrada, hubo un viaje maravilloso. Hay un ejemplo que lo resume muy bien: me reuní con el director general de FOX España y le pregunté cuánto deberían durar los capítulos, que veníamos de 70 minutos. Me miró y me dijo: «Pues, Iván, lo que necesite la historia».

Creo que algo de ese ejemplo está vinculado a esta especie de eclosión salvaje de las ficciones, de cómo han viajado e inundado el streaming en todo el mundo.

¿Qué podemos esperar de esta temporada final?

IE: Es la quinta y última temporada. Habíamos hecho cuatro temporadas metidos en la cárcel, habíamos hecho un mundo de nuestro mundo carcelario -que es el mundo emocional de mujeres buscando la libertad-, y llegó un punto en que nos planteamos qué pasaría si estos personajes estuviesen fuera.

Teníamos la obsesión de no repetirnos, de divertirnos. Si nosotros nos divertimos, el espectador se divierte. Entonces sacamos a nuestros dos personajes icónicos [Maca, interpretada por Maggie Civantos, y Zulema, por Najwa Nimri] fuera de la cárcel, las rodeamos de un entramado emocional de personajes maravillosos, y nos planteamos esta última temporada como una despedida, una especie de western crepuscular de personajes que se odian, se quieren y se dan cabezazos contra la pared.

SG: Qué mejor que sacar a estos dos personajes a un sitio donde no las habíamos visto nunca desarrollarse, y mucho menos desarrollarse juntas.

IE: Es curioso: hemos hecho una historia de libertad en una época de confinamiento. Mientras nosotros consumíamos Vis a vis, nuestros personajes estaban sufriendo un confinamiento horrible, y ahora nosotros estamos sufriendo un confinamiento y hemos decidido soltar a nuestros personajes. Disfrutan de una libertad que nosotros ahora no tenemos.

Vis a vis: El oasis se ha promocionado como un spin-off, ¿lo es?

IE: Para nosotros es una continuación natural. Y si te soy sincero, la hemos predefinido como un regalo a los fans: ocho capítulos de homenaje a ellos. La despedida real de ese viaje de los personajes. Es cierto que salen de su zona de confort, nosotros también. Hubiese sido todo mucho más sencillo dejarlas en Cruz del Norte. Pero nos parecía un reto intelectual sacarlas y sacarnos, y generar una temporada diferente.

Hemos crecido profesional y personalmente con esta serie, y nos apetecía finalizar ese viaje que iniciamos hace unos cuantos años.

¿Y finaliza realmente el viaje? ¿Es la despedida definitiva?

IE: Absolutamente. Nos ha costado. Es muy difícil finiquitar a personajes que nos han acompañado tanto. Es una especie de muestra que llevaremos en el corazón, Sandra como directora y yo como guionista.

Se habla de la edad de oro de las series españolas, pero yo creo que realmente es la edad de oro del espectador. El espectador actual demanda finalizar el viaje. Teníamos el compromiso de ser fieles a esa Marea Amarilla, a esos fans, a nuestros personajes y a nuestra propia vocación de narradores, y finalizar la historia. Y lo hemos hecho.

SG: No tiene sentido seguir alargando la historia. El final es el que cósmicamente le correspondía mejor, el más fiel a los personajes.

A nivel visual, ¿qué retos representó salir de la icónica cárcel?

SG: Esta temporada transcurre en exteriores. Y el guion está roto temporalmente. Así que tuvimos que encontrar espacios muy significativos para que el espectador se ubicara en ese sentido, que reconociera que estaba viendo Vis a vis. Y, aunque las ópticas y los colores sean diferentes, el espíritu de Vis a vis sigue estando. La ves y hay algo -al igual que en la primera temporada- hipnótico.

¿Cómo es trabajar para la Marea Amarilla? ¿Condiciona, motiva, presiona?

SG: El poder de la Marea Amarilla es evidente: han revivido la serie dos veces. Pero los fans piden un montón de cosas y tiene que haber una única voz que marque el rumbo de la historia. Me conmueve la pasión con la que viven la serie, pero hay que tomar decisiones y seguir una línea, y eso es trabajo del creador.

IE: Cuando la Marea Amarilla opina sobre los capítulos, nosotros ya los hemos grabado, montado, sonorizado… ya nos hemos dado de cabeza con ellos. Lo que más me ha llamado mucho la atención es ver cómo las actrices y actores se involucraban en un proyecto que no era solo un trabajo.

Todos venimos de trabajar en series de todo tipo, y Vis a vis nos ha hecho reír, llorar, nos ha desvelado… Hemos adorado a esa Marea Amarilla y nos teníamos que despedir de una manera grande. Y el capítulo final es una gran despedida.

¿Se vienen nuevos proyectos del equipo de Vis a vis?

IE: En todo proyecto que yo esté, quiero que esté Sandra. En Globomedia estamos trabajando juntos en nuevas series. Una de ellas es Express, un thriller.

Pero estamos en una época de incertidumbre. No sabemos si en nuestra próxima historia nuestros personajes tendrán que ir con mascarillas y besarse en la boca o en los codos. Aun así, estoy convencido de que las series, las películas, los libros, el teatro… todo volverá. Siempre vamos a necesitar historias, porque nos hacen mejores.