El lanzamiento de HBO Max este año en América Latina revolucionó los esfuerzos de WarnerMedia en producción original en la región, al unificar todas sus marcas bajo un único paraguas que lleva en su nombre tres simples letras, pero de mucho peso: H B O.
Es por eso que, a la hora de producir, ese nombre de pila pesa en una estrategia que busca no solo la calidad, sino también la popularidad.
«Si uno en América Latina le pregunta a un taxista si vio Euphoria seguramente le va a decir que no, pero si le pregunta por Games of Trones le va a decir que sí. Y ese es el objetivo, tratar que el producto generado en América Latina cumpla ese efecto, que más y más personas accedan a un producto de calidad, pero de forma masiva. La calidad es una condición no discutible para nosotros. Le ponemos toda la inteligencia para poder hacerlo. Y generar productos masivos, con calidad, es el gran desafío que tiene HBO Max por delante», resumió Marcelo Tamburri, jefe de Desarrollo de HBO Max América Latina, en la siguiente entrevista con Originals.
¿Qué tipo de contenidos están buscando para producir?
HBO Max tiene una estrategia muy definida en cuanto al tipo de producto para su pantalla. Básicamente hoy estamos muy enfocados en encontrar historias locales pero universales, que no requieran de un profundo conocimiento histórico o sociopolítico de un país para ser disfrutadas. Estamos buscando impactar sobre una audiencia joven, básicamente el joven adulto en los targets 18-35 y 18-40.
También hay una audiencia muy interesante para generar producto que es el teen, el 13-17 y 13-20.
¿Y en cuánto a géneros?
Hay géneros que funcionan mejor que otros como el thriller, el true-crime o el dramedy, que funciona mejor que la comedia pura, pero no vemos grandes limitaciones en ese sentido. Sí buscamos que sea un producto mainstream, y ese es el gran desafío que tiene una compañía como la nuestra sobre todo con la marca HBO atrás. HBO tiene asociado la calidad, que no está en ningún momento en discusión, es un must para nosotros y cualquiera de nuestros productos.
Pero por el otro lado tratamos que aquello que era inalcanzable para una gran audiencia, que era la marca HBO, hoy esté disponible. Y creo que la plataforma lo proporciona. Nosotros estamos buscando ser complementarios a lo que es la producción de EEUU. HBO genera producto que puede impactar en audiencias más reducidas como pueden ser Euphoria o I May Destroy You. Son series que tienen una calidad, una temática donde se presentan más conflictos internos que externos y son claramente productos con un sentido de acceso un poco más elevado. En EEUU obviamente las audiencias son enormemente masivas y eso los impulsa.
Pero en América Latina eso es más difícil…
Claro, de nuestro lado está el cómo complementar eso desde el punto de vista local, tratar de generar historias más cercanas a la gente, aprovechar los elementos que son distintivos de cada región. Creo que en Latinoamérica el melodrama es una cuestión que funciona increíblemente bien.
¿Y van a hacer melodramas entonces?
Sí, vamos a hacer telenovelas también, de eso no hay dudas. Y dentro de las series de calidad, queremos incluir el componente melodramático también. Eso funciona muy bien, acerca a las personas. Si uno en América Latina, en México, le pregunta a un taxista si vio Euphoria le va a decir que no, pero si le pregunta por Games of Trones le va a decir que sí. Ese es el objetivo, tratar que el producto generado en América Latina cumpla ese efecto, que más y más personas accedan a un producto de calidad, de forma masiva. La calidad es una condición no discutible para nosotros. Le ponemos toda la inteligencia para poder hacerlo. Generar productos masivos, con calidad. Ese es el gran desafío que tiene HBO Max por delante.
¿Planean coproducir con España en algún momento?
Las series españolas han funcionado muy bien en HBO. Patria, Maricón perdido. Cada una en su audiencia ha tenido buenos resultados. Y cada vez más uno produce productos locales pensando mucho más en productos globales. Definitivamente en una compañía como la nuestra el hecho de encontrar las sinergias es sumamente importante y creo que hoy hay una gran oportunidad que está mucho más allá de si tiene actores mexicanos o colombianos.
El producto español ha entrado en el mundo y en Latinoamérica sin ningún problema y estimo que en algunos años va a suceder lo mismo con el producto generado en América Latina. Definitivamente, buscar ese encuentro es algo natural, no es nada forzado. Estamos trabajando con los equipos de España para tratar de encontrar qué productos podemos cruzar, y con aquellos que no podemos cruzar, ver si tiene sentido hacerlos en coproducción. Lo importante es que se han bajado barreras y eso es lo que va a permitir que se amplíen los horizontes de los productos.
Hace poco comentó que recibe 1.000 proyectos al año. ¿Cómo le gusta recibirlos?
Me encanta recibir los proyectos en estado de desarrollo puro. La verdad que en nuestro equipo de América Latina somos muy «hands-on», de meter mano, de acompañar al proceso creativo. Tratamos de orientar a los creativos hacia la estrategia a la cual estamos abocados, ayudarlos a construir el producto adecuado, y claramente eso implica recibirlo en un estadio de desarrollo. Y el desarrollo nos gusta trabajarlo muy claramente a partir de una biblia, un documento que permita interpretar el arco de la historia, los perfiles de los personajes.
¿Tienen planes de producir en todos los países de la región?
La verdad es que tenemos un gran desafío por delante. Ya contamos con un pipeline de desarrollo bastante amplio. La región es muy grande, con muchos países, pero básicamente nuestra producción está concentrada en países como México, Brasil, Colombia, Argentina o Chile. Son los países más relevantes de la región en términos de impacto de audiencia. Y específicamente productos que salen de México son más exportables a otros mercados.
¿Es partidario de los reboots?
Realmente no, pero creo que hay muchos que tienen sentido. Aquellos que somos padres sabemos que nuestros hijos no han visto mucho de lo que hoy se edita de otra manera. Definitivamente tener una versión nueva de un clásico probablemente es algo novedoso para mis hijos. Obviamente hay que aggionarlos, llevarlos al siglo XXI. Y la verdad es que muchos funcionan muy bien. Y son originales para la gente joven con la ventaja de tener una fanbase ya creada, un brand equity ya creado y fórmulas ya probadas.
Nosotros tenemos también una división literaria interna a través de la cual buscamos derechos literarios para poder adaptar de forma audiovisual. Y tenemos un plan de talentos interno que nos permite desarrollar nuestras propias historias.
¿En cuántos desarrollos están trabajando actualmente?
En el orden de 70 u 80 desarrollos en la región. De esos, esperamos que lleguen a producción unos 30 y pico, de manera tal de tener lo mejor de lo mejor. La oportunidad de desarrollar ideas te permite seleccionar aquello a lo que uno le ve mayor probabilidad de éxito.