El productor ejecutivo dialogó con ttvnews acerca de la nueva apuesta de ficción de Mega de Chile, detallando los elementos que hacen de esta historia una con la que todos los chilenos podrán identificarse.
«¿Y tú, cuánto has cambiado?». Con esa premisa llegó el pasado lunes 5 de junio a la pantalla de Mega de Chile Generación ’98, su nueva propuesta de ficción donde siete ex compañeros de colegio que se reencuentran en una inesperada reunión de curso, después de 25 años sin verse.
En este contexto, empiezan a surgir los recuerdos y diversas anécdotas que traerán más de algún problema, generando «una historia muy potente que es muy atractiva de ver», en palabras de su productor ejecutivo, Patricio López, quien compartió con ttvnews detalles del proceso de creación de esta nueva ficción y por qué es una cita obligada para las audiencias chilenas.
¿Qué fue lo que te atrajo de esta historia?
Estamos muy ilusionados con este estreno. Primero porque venimos de una teleserie que se llamó Hijos del desierto, que tiene un tono totalmente distinto. Tratamos de entregar variedad en nuestros contenidos y ese objetivo se está cumpliendo.
¿Qué me atrajo de esta serie? Sin duda la historia. Me parece que Pablo es un tremendo escritor y creador, y es motivante trabajar con él. Segundo, porque me pareció que la historia tiene mucho que ver con la humanidad post pandemia. Siento que después de estar encerrados tanto tiempo, nos falta un sentido de pertenencia. Y eso está representado totalmente en esta serie, porque habla de una generación de amigos que salieron del colegio en el año 1998 y están rondando los 40 años, y deciden juntarse de nuevo. Porque nosotros como seres humanos necesitamos reunirnos. Y sentirse que pertenecemos a un grupo de ex alumnos y contar su historia en cuanto a los años que han pasado me pareció muy novedoso. Hay una memoria emotiva muy potente en esta historia. Lo que genera esa juntada es muy potente para generar una historia y es muy atractivo de ver. El slogan lo dice, «¿Tú cómo has cambiado?» Esa es la motivación principal para producir este proyecto. Creo que es una historia que va a tener una muy buena llegada.
Una historia tan interesante, con tantas aristas, seguro impuso grandes desafíos…
Si, más que nada, tiene que ver con que la gente necesita verse reflejada de alguna manera. Y con esta historia hay elementos que permiten ese efecto. Nosotros como TV abierta necesitamos ser masivos, ese es nuestro principal objetivo. A diferencia de las OTT, tenemos que llegar a todos y tener personajes que lleguen a todo publico. Eso es cada vez mas difícil, los contenidos tienden a nicharse. Nuestro gran desafío entonces es ser una historia transversal en términos de contenido para que tenga una gran audiencia.
¿Qué puedes compartirnos del detrás de escenas?
Nosotros tenemos un area dramática que tiene un esquema de producción en linea con unas seis teleseries al año, sin parar una tras otra. Y cuando vienen estos cambios de tono, son atractivos para nosotros como productores. Efectivamente, aunque uno no lo crea, son largas producciones de 150 o 160 capítulos, con los actores encerrados por meses. Pero si estas haciendo una comedia romántica como es Generación ’98, es otro el espíritu, es otra manera de enfrentar el trabajo. Claramente lo hemos pasado muy bien, es una serie muy grata de realizar.
Además, es un elenco nuevo para nosotros desde el punto de vista de la mezcla que hemos hecho. Es un elenco muy atractivo para la audiencia chilena.
Y en términos de producción, es una serie que se está grabando en 4K. Nuestros estándares de producción han mejorado considerablemente, estamos al mismo nivel que las OTT. Efectivamente los tiempos de producción son los mismos, ocho meses de rodaje, grabando en exteriores en Santiago y en los sets en Mega. Nuestro objetivo siempre es ir subiendo la calidad de producción. Con esta producción seguimos mejorando en la medida de nuestros presupuestos, que en LatAm son más acotados. Hacemos excelentes producciones que técnicamente no tienen nada que envidiar a otras producciones de la región.
Como mencionabas, Generación ’98 cuenta con un gran elenco. ¿Cómo fue el proceso de trabajo para ellos en este ámbito coral?
Nosotros tenemos un pool de actores que son los más conocidos, pero intentamos siempre incorporar nuevos talentos, además de generar nuevas mezclas entre ellos. En este caso de Generación ’98 estamos muy sorprendidos con lo que se generó; con cómo los actores han encajado con los personajes. Y también efectivamente nuestros actores son muy versátiles. Están acostumbrados a realizar una serie tras otra. Hacemos muchas páginas al día, en un plan de grabación donde tienes que grabar escenas de capítulos distintos en un mismo día. Nuestros actores son grandes actores y tienen ese training que lo da solamente la telenovela, y se agradece cuando llegan a las series o películas.
¿Cuáles son tus expectativas para el estreno?
Es muy difícil en tiempos de streaming decirle a la gente «te voy a contar una historia y será durante una hora a partir de las 22:00». El producto debe ser muy potente para generar ese atractivo a la audiencia, y los nuestros lo han sido durante los últimos años. Yo creo que el final de Hijos del desierto y el comienzo de Generación ’98 nos entregará un tremendo piso de audiencia que nos dará la oportunidad de mostrarles esta gran serie. Estoy convencido de que tomando en cuenta la diferencia entre una historia y otra, la audiencia se va a enganchar. Hoy en día precisamos reírnos y pasarla bien; es una excusa para poder relajarse, verla, comentarla y esperar al siguiente capítulo. Eso es lo que más queremos, que la gente se enganche y se divierta.
Para cerrar, en pocas palabras, ¿por qué las audiencias chilenas no pueden perderse Generación ’98?
No hay nadie que no se vaya a sentir identificado con esta historia. Todos tenemos un grupo de amigos que no hemos visto y queremos verlos. O que no quieres verlos y debes verlos igual. Eso es muy atractivo. La memoria emotiva, apelar a la gente de ver cómo hemos cambiado en el tiempo. Me parece que es muy atractivo de contar y de ver.
