Roberto Blatt, director del Instituto de Cine y Audiovisual del Uruguay (ICAU), detalla a ttvnews los planes, beneficios e incentivos del país como socio estratégico para la producción de proyectos internacionales.
En estos tiempos de pandemia e incertidumbre, Uruguay ha quedado en el foco internacional y, en particular, en el ojo de mira de la industria audiovisual.
Es que, gracias a una respuesta acertada a la crisis sanitaria, el país sudamericano ha reactivado su industria audiovisual -en un contexto regional complejo-, además de lanzar convenios, acuerdos y fondos para ubicar al país como un socio estratégico para la producción de proyectos de cine, TV y publicidad.
Con una amplia trayectoria en la industria audiovisual internacional, Roberto Blatt, nuevo director del Instituto de Cine y Audiovisual del Uruguay (ICAU), comparte con ttvnews los planes estratégicos para internacionalizar la industria audiovisual local.
¿Cuál es la actual situación de la producción audiovisual en Uruguay?
La pandemia nos ha puesto en una situación relativamente competitiva. Al mismo tiempo, desde el Estado se ha tomado en cuenta la situación y que esta es una industria que tiene un efecto de derrame importante, tanto como generadora de puestos de trabajo como en cuanto a la creación y refuerzo de la marca país hacia afuera.
Por otra parte, es una forma de arte-industria que activa otras formas de arte y cultura, porque necesitamos gente que escriba, diseñe y actúe y que provienen de diferentes marcos. Por lo tanto, se ha entendido que -a pesar de las restricciones que vamos a tener que aceptar por la situación gravísima económica y social-, el hecho de apoyar a esta industria es una manera de apoyar al país.
Junto al seguimiento de la curva del coronavirus y a la magnífica respuesta social, estamos reforzando herramientas que ya existían. En lugar de limitarlas, reducirlas, y generar situaciones de ahorro, estamos reforzándolas para apoyar el audiovisual.
¿Cuáles son estas herramientas?
Estamos negociando subidas de fomentos, reforzando y cerrando los detalles de la renovación definitiva de un PUA [Programa Uruguay Audiovisual] multianual, de una conexión público-privado, y también tenemos proyectos a medio plazo para incentivar la inversión directa privada en el audiovisual.
En este sentido, hace poco se lanzó la plataforma Uruguay Audiovisual como parte de una estrategia para ubicar a Uruguay como destino de la industria internacional. ¿De qué manera se complementa con los planes del ICAU?
Uruguay Audiovisual es un partner fundamental para el ICAU. Lo lleva de forma operativa Omaira Rodríguez y es perfectamente complementaria con los objetivos del ICAU. Estamos hablando de una actividad artística-industrial que afecta a más de un Ministerio. Yo represento el lado creativo que filtra aquellos proyectos que tienen capacidad de prosperar en términos de contenido; mientras que el PUA [Programa Uruguay Audiovisual] está asociado más al Ministerio de Industria, y se refiere a criterios de inversión y financiación.
¿Cuál es la situación local con respecto a los protocolos, rodajes y presencia internacional?
Estamos en una situación completamente dinámica. El país había llegado el año pasado a producir unas 20 o 22 películas y un volumen importante de publicidad. Lo increíble es que ahora que hemos encontrado un protocolo y unos métodos eficaces para poder producir, no solo estamos superando la producción de publicidad del año anterior, sino que hay unas 7 películas que se están rodando en el país. Hay varios proyectos, de Amazon, de HBO; proyectos argentinos que estaban concebidos para ser rodados en la región y se han volcado hacia Uruguay. Vamos a conseguir probablemente hitos históricos.
¿Y a nivel de presencia en mercados internacionales?
Gracias a la manera que hemos reaccionado en la participación del Marché du Film virtual de Cannes, hemos alcanzado el récord de representación con 20 productoras que están comenzando una relación con coproductores internacionales.
Por otra parte, estamos dándole contenido a un acuerdo que ya se había alcanzado con Francia.
Estamos abriendo la nueva convocatoria de coproducción internacional minoritaria, abriendo la veda. Antes la coproducción minoritaria contaba solo para aquellos países con los cuales se había fijado un convenio y se reducía a lo latinoamericano. Si bien hay que respetar los convenios, tenemos que abrirnos necesariamente, entonces estamos incluyendo nuevos interesados.
Vamos a poder juntarnos con grandes capitales y proyectos, siempre aportando según la ley, un mínimo de un 20%, favoreciendo aquellos contenidos que nos representan de forma directa. Los cambios están siendo inmensos y todos ellos favorecen el crecimiento.
¿Cuáles son los planes para complementar el desarrollo de talento y las necesidades específicas del sector local?
La industria es consciente del desarrollo de talento y es por eso que en su proyección hacia el 2030 tiene previsto planes para desarrollar talleres de formación tanto técnica como creativa.
La mayor aportación que vamos a hacer desde el ICAU tiene que ver con dos patas: la primera es la que venimos hablando, que es la internacionalización. La segunda es la del territorio: expandir el potencial y la presencia del audiovisual a todo el territorio nacional.
Estamos haciendo un relevamiento y viendo qué oportunidades hay, no solo llegando con más contenido uruguayo sino de ir promocionando talentos y capacidad técnica en el interior del país. Lo estamos haciendo en conjunto con las productoras que están interesadas en tener más escenarios y más potencial creativo y técnico.
¿Cuál será la presencia de Uruguay en las ferias y festivales internacionales?
Sea de forma presencial o mixta, el ICAU va a apoyar una ampliación para estar en más festivales, mercados y encuentros internacionales. Esta situación mixta va a permitir hacer muchas más cosas por el mismo dinero y tiempo.
En este sentido, ¿cuál es la situación de Uruguay Film Commission?
Estamos todos negociando para encontrar el mejor formato posible. La Film Commission va a tener un lado de la industria y un lado creativo-cultural. Por lo tanto, habrá una representación coordinada. De hecho, aún sin tener ese cartel encima de nuestras cabezas, ya estamos colaborando todos. Estoy maravillado de hasta qué punto podemos actuar de forma conjunta para conseguir un objetivo común.
¿Por qué producir en Uruguay?
En Uruguay hay una generación audiovisual madura que llega a su cúspide y que lo ha demostrado por su trayectoria. Tenemos una capacidad extraordinaria para crear contenido audiovisual en todos los géneros, desde lo comercial hasta lo autoral.
Por otro lado, llegamos a un momento en que empiezan a reforzarse las herramientas necesarias para atraer la inversión internacional.
A través del éxito de nuestras películas, llamar la atención sobre nuestro talento, capacidad técnica y sobre nuestros paisajes y atraer proyectos para que se rueden en Uruguay con incentivos suficientes.
Y está el factor de lo que representa la sociedad uruguaya. Una sociedad democrática, con sentido cívico y seguridad jurídica, que favorecen la mirada internacional hacia nosotros. Creo que cumplimos con todos los requisitos que nos incentivan a ser más competitivos.