Millones de personas resguardadas en sus hogares debido al avance del coronavirus se ha traducido en altos ratings para la TV abierta estadounidense, cuyos niveles de visionado se catapultaron en la última semana.
Mientras miles de industrias se ven afectadas negativamente por el avance del coronavirus a nivel mundial, para la televisión han sido resultados mixtos, siendo que por un lado ha visto casi todas sus producciones detenidas, y la cancelación de todos los deportes y eventos en vivo; pero por otro, ha registrado los ratings más altos en su historia.
Es que con millones de personas teniendo que quedarse en sus casas, la TV se ha vuelto el entretenimiento preferido para muchos.
En EEUU, en una semana que normalmente marca un descenso en el visionado debido al cambio hacia el horario de verano, los canales abiertos superaron sus propios récords de ratings en todos los casos.
Por ejemplo, este lunes, The Voice por NBC vio sus ratings aumentar un impresionante 38% desde la semana anterior entre adultos de 18 a 49, alcanzando más de 1 millón de televidentes totales y registrando así su episodio más visto en más de un año, según datos de Nielsen.
Por su parte, el formato de entretenimiento Game of Games este miércoles creció 44% en ratings en una semana, alcanzando más de 1,6 millones de televidentes; mientras que This Is Us, creció tres décimas en el demo de 18 a 49.
Este crecimiento implica que, mientras que el streaming se posiciona como el favorito para crecer en este período -en especial entre el público más jóven-, la TV tradicional está viendo los beneficios del aislamiento social.
La cantidad de televidentes registrados a nivel general para la TV abierta en prime time en EEUU creció todos los días de la semana pasada, con los números del lunes superando incluso los registrados durante el Martin Luther King Jr Day (13 de marzo).
Los expertos en la materia esperan que el crecimiento de los niveles de visualización continúe a medida que más personas se queden en casa en medio de restricciones cada vez mayores, incluidas cuarentenas, en todo el país.
En cuanto a cualquier efecto a largo plazo, es demasiado pronto para decir si los televidentes más jóvenes que “descubrieron” la TV tradicional volverán cuando termine el brote. Pero, por el momento, el aumento de los ratings puede ser la única buena noticia para los canales, que enfrentan pérdidas por la suspensión de la mayoría de los deportes principales, temporadas inacabadas ya que muchas series cierran por los temores de COVID-19 antes de finalizar la producción, y una pésima temporada de pilotos.
