José Augusto Miranda, director de Programación de Canal 13 de Chile, comparte con ttvnews la actualidad y los desafíos del canal chileno en esta coyuntura de cuarentena donde la creatividad en la producción y el diseño programático es fundamental.
Como la gran mayoría de los canales de TV abierta en el mundo, ante la pandemia global del Covid-19 Canal 13 de Chile debió reformular su diseño programático para revertir una situación de crisis sanitaria, social y económica.
En este contexto inédito, José Augusto Miranda, director de Programación de Canal 13 de Chile, comparte con ttvnews la experiencia de comandar la grilla de programación del canal chileno implementando nuevos modelos de gestión, producción, programación y emisión.
¿Cómo está la situación actual en Chile?
La situación es complicada porque se viene el invierno. Entonces está la pandemia y la otra pandemia, la económica. Nosotros veníamos además de una complicación muy grande que era el estallido social del 18 de octubre. Es una tormenta perfecta para una crisis económica de proporciones…
Y, ¿cómo ha sido la adecuación de Canal 13 a esta realidad?
En esa lógica en Chile las parrillas programáticas comienzan en marzo. Todo se juega para marzo y este año era un mes importante para cada canal de TV. Nosotros empezamos con el Festival de Viña que nos fue muy bien con una inversión muy grande. En marzo volvimos a hacer TV en vivo y entretenimiento familiar. Nos aliamos a La Flia de Argentina e hicimos el programa Bailando por un sueño. Estábamos grabando una nueva teleserie para el segundo semestre. Todos los proyectos que deberíamos estar produciendo con la pandemia se complicaron. Paramos Bailando. Estamos viendo cuándo podemos retomar las grabaciones. Tuvo 12 emisiones. Logramos liderar el prime. Esto vino a replantear todo el escenario.
¿Qué alternativas surgieron en diseño programático?
Hoy días estamos en dos etapas. Tenemos los matinales que son como un magazine show. Antes del estallido social nos perfilamos de que fueran muy informativos. Y con la pandemia creció más ese perfil y hoy en día estamos empatados con los canales que lideraban la mañana. La diferencia es que la mitad del equipo de producción trabaja en el canal y la otra en su casa. Lo mismo con los conductores. Todo esto por el distanciamiento social voluntario. Muy poca gente en los sets.
En el caso del prime time, le echamos mano al envasado. Logramos adquirir cuando sucedió lo de Bailando, Pablo Escobar: el patrón del mal que fue muy exitoso en Chile por el 2012 por otro canal. Nos ha ido bastante bien, pudiendo mantener el rating comercial. Finalmente, lo que hicimos fue la eficiencia de la parrilla programática, entendiendo de que también hay una baja importante de la inversión publicitaria. Entonces, ¿cómo seguir siendo competitivos sin desangrarnos tanto?
Teníamos un late night show que lo hemos ido acondicionando, reemitiendo grabaciones o grabando en las tardes con entrevistas vía streaming.
También el canal innovó con nueva programación…
Empezamos a trabajar dos proyectos. Uno que ya teníamos antes en la parrilla y que estrenó el 13 de abril que es un programa de servicios. Es un daily show en la tarde que se hizo con una productora externa. Se llama Aquí somos todos. Hoy día con la pandemia el programa ha tomado aún más fuerza.
En el acces antes de las noticias, reestrenamos la primera temporada de MasterChef que dimos hace varios años atrás. Nosotros en prime time los días que no iba el Bailando, teníamos MasterChef Celebrity, que lo grabamos en Colombia. No tuvimos problemas en seguir emitiendo. La final se graba en estudio y es para junio, o sea que tenemos tiempo para hacerlo… Va dos días a la semana.
Para los viernes, creamos el proyecto Abrazo en línea que para nosotros es muy inédito. Es el primer docu reality cien por ciento del hogar. Contamos historias de cómo se está viviendo la cuarentena. Ya sea de famosos, pero esencialmente de personas anónimas con historias muy fuertes. El conductor es Francisco Saavedra. Estamos muy contentos porque nunca se había hecho un programa así en prime time. Creemos que hemos podido demostrar que al estar privados de encontrarnos físicamente en el canal hemos podido sacar la mejor creatividad y crear un programa competitivo.
Abrazo en línea
¿Cómo fue la respuesta de la audiencia?
Estrenamos el viernes santo y Chile es un país que funcionan ciertas tradiciones. Hay una ficción católica que funciona muy bien en el canal de la competencia. Fue un día con alto encendido. La recepción fue muy buena. Hemos tenido incluso llamadas de colegas del exterior preguntando por el formato. Es un programa que no tiene una envergadura tan ambiciosa, pero tiene algo que es fundamental y que son muy buenas historias. Esa es la receta de cualquier producto. Esperamos que sea un programa que lo tengamos por 10 o 12 capítulos.
¿Cómo llegan a las historias?
Hacemos un barrido alto por las redes sociales. Estamos con una presencia muy importantes en los magacines y noticieros buscando ese caso que pueda ayudarnos a representar lo que está sucediendo en Chile. Además, hemos recibido después del primer programa unas 25 historias… Descubrimos un formato nuevo. Y esto tiene una cosa muy bonita. Es muy inusual. Tener la posibilidad de crear algo desde cero, un docu reality totalmente creado en teletrabajo; eso yo nunca lo había visto en ningún mercado. Es un mensaje a nuestros colegas en el mundo que también es posible.
Las TVs abiertas están pasando por un momento complejo debido a las nuevas formas de consumo, en general los medios tradicionales están pasando por una crisis no solo en Chile sino en el mundo…
Chile es un mercado muy competitivo porque es muy pequeño. Todos buscamos la posición del líder. Yo creo que hoy día si algo cambió en esta crisis es que la discusión no está por quién gana el punto de rating sino cómo hoy en día recuperamos algo que era esencial: la TV es el principal medio de comunicación que tiene el mundo. Hace dos días atrás el presidente dio a conocer un acuerdo de Anatel, donde ahora en nuestras segundas señales vamos a transmitir un canal educativo infantil y entre todos los canales creamos una parrilla única. Una parrilla que se alimenta de todos los contenidos de Canal 13, Mega, TVN… Eso tiene que ver con entretener y educar al público infantil. Volvemos a la esencia del rol que cumplía la TV pre internet. Ha sido muy desafiante como medio de comunicación.
Aquí somos todos
¿Y qué rol juga hoy el enlatado?
Yo creo que volvimos todos a también a mirar el envasado que se había perdido en la TV chilena con las grandes producciones que todos teníamos. Y el envasado te sigue diciendo que es un backup interesante…
¿Cuáles son los desafíos de Canal 13 para las próximas semanas?
Lo desafiante es saber cuánto puede durar esto. Estamos teniendo diferentes parrillas programáticas y las vamos adecuando. Por ejemplo, la idea es que Bailando vuelva pronto… Pero se necesita un tiempo para encender la máquina. Ojalá todo vuelva a ser parecido porque no creo que vuelva a ser igual.
¿Qué le interesa buscar en el mercado internacional?
Canal 13 ha sido un canal donde siempre ha tenido espacio el formato de gran escala. También queremos empezar a hacer crecer la máquina de hacer formatos, como es el caso de Abrazo en línea o Aquí somos todos… Igual que nuestra ficción. Tenemos un área de ficción muy importante. Yo creo igual -pensando en los formatos- que hay una crisis creativa. Ojalá que con esta pandemia empecen a salir cosas nuevas…