PATE, asociación de productores audiovisuales españoles, denuncia que el modelo de las OTT está provocando el colapso del sector. «El productor independiente es una especie a proteger», afirmó José Manuel Lorenzo.
En un encuentro titulado «Producción independiente, motor de crecimiento», celebrado en el auditorio de Casa de América en Madrid, PATE (Productoras Asociadas de Televisión de España) denunció el «colapso» que ha provocado la llegada de las plataformas de streaming en la producción independiente local.
El productor José Manuel Lorenzo, presidente de DLO Producciones (Banijay) y también de PATE, reconoció que la irrupción de Netflix y los demás streamers fue recibida con buenos ojos en un primer momento, por la inversión de capital, generación de empleo y potencial de distribución mundial.
Sin embargo, varios factores fueron llevando a esta situación de colapso: «El precio a pagar ha supuesto un deterioro de la relación, ya no tenemos retorno económico por emisiones en segunda ventana, no hay primas de éxito en otros países, no hay pago de derechos por reproducción», sostuvo Lorenzo.
Actualmente, PATE aglutina a 40 productoras de cine, series, documentales y programas de entretenimiento, entre las que se encuentran grandes grupos, como Banijay, Mediapro, Secuoya, Mediawan o Newen.
En total, está representado el 75% de la producción española de series y el 50% de la taquilla de los cines. En conjunto facturan más de 2.000 millones de euros y dan empleo a más de 20.000 profesionales.
El acto buscó mostrar la postura del sector de la producción independiente ante el proyecto del gobierno español de crear el Spain Audiovisual Hub para que el país se convierta en referencia europea e internacional. Dicho plan conlleva una inversión de 1.603 millones de euros entre 2021 y 2025.
Así, entre los reclamos de la asociación destaca una definición legal de la figura de productor independiente, que contemple su doble faceta de creador y empresario. Con esto, buscan garantizar que las ayudas directas o indirectas les lleguen, así como retener los derechos de propiedad intelectual de las obras.
Según denunció Lorenzo, los streamers «adquieren derechos de por vida, a veces del cien por cien de la propiedad intelectual, sobre precuelas, secuelas y todo sin ninguna obligación con el creador que lo ha originado más allá de la buena fe».
«El productor independiente es una especie a proteger», continuó.
Y José Nevado, director general de PATE, resumió: «Nuestro objetivo es uniformizar en el marco regulatorio la definición de productor independiente para que no exista incertidumbre, para acceder a los derechos de propiedad intelectual y que la parte de incentivos y ayudas pivote en torno a la producción independiente».