Johannes Gropp, fundador y director ejecutivo de StoryZoo, habló con ttvnews sobre la importancia de crear contenido de alta calidad que se destaque por ser entretenido y educativo, y que ayude a formar la mente de los niños en todo el mundo.

Con la proliferación de plataformas de streaming, los niños están expuestos a una gran cantidad de contenido a diario, lo que dificulta que elijan qué ver, y que los padres filtren y determinen qué es realmente bueno y qué no.

El mayor reto para los productores de contenido infantil es destacarse entre todo este contenido, y StoryZoo cree que es importante hacerlo, pero por las razones correctas. El grupo con sede en Ámsterdam se centra en «educar a través de la alegría», creando y ofreciendo contenido de alta calidad que no solo entretiene a los jóvenes espectadores, sino que también les enseña valores y habilidades necesarias para crecer.

El contenido de StoryZoo se selecciona con este lema en mente, centrándose en una educación divertida, respetuosa y apropiada para cada edad, con el aprendizaje disfrazado de juego.

En la siguiente entrevista con ttvnews, Johannes Gropp, fundador y director ejecutivo de StoryZoo, habla sobre el objetivo de la empresa de crear contenido de alta calidad, comenzando desde una edad temprana con la exposición al idioma y tratando cada contenido como algo que pueda moldear la mente de los jóvenes.

¿Cuál es su visión actual de la industria del contenido infantil? ¿Cuáles cree que serán las principales tendencias en cuanto a géneros y producciones para 2025?

La industria del contenido infantil actual es como una tienda de dulces sin etiquetas: brillante, colorida y, a veces, abrumadora. Si bien es fantástico que haya tanta oferta, no toda es buena para las mentes en desarrollo. Por eso creemos que el entretenimiento de alta calidad y significativo es más importante que nunca.

Para 2025, prevemos un auge del entretenimiento educativo, la narrativa inclusiva y, afortunadamente, un regreso al contenido que prioriza la calidad. StoryZoo forma parte de ese movimiento. Nos centramos en contenido que no solo ocupa el tiempo en pantalla, sino que lo enriquece, especialmente a través de la exposición temprana a idiomas extranjeros, lo cual supone una gran ventaja para los jóvenes estudiantes.

¿Cuáles son los principales retos de la producción de contenido infantil hoy en día? ¿Qué buscan al seleccionar proyectos para su catálogo?

¿El mayor reto? Destacar por las razones correctas. Existe una gran cantidad de contenido, pero gran parte es apresurado, superficial o carece de valor educativo real. Lo cierto es que los niños no siempre pueden elegir lo que ven, por lo que es nuestro trabajo como productores asegurarnos de que lo que se ofrece sea lo mejor.

Al evaluar nuevos proyectos, buscamos creatividad, adaptabilidad cultural e integridad educativa. ¿Enseña algo? ¿Lo hace de forma divertida, respetuosa y apropiada para cada edad?

Con StoryZoo y nuestra serie StoryZoo Adventures, ya habíamos colaborado de forma increíble con el Museo Van Gogh, la Orquesta Sinfónica de Londres y la Agencia Espacial Europea. Hemos creado un formato que introduce a los niños a la cultura, la música y el conocimiento general. Es aprendizaje disfrazado de juego, y ese es el ingrediente secreto.

¿Cuáles son los títulos estrella de su catálogo actual para el mercado internacional?

Nuestra serie insignia, StoryZoo Adventures, sigue siendo la protagonista de nuestro catálogo. Es multilingüe, con una animación encantadora y cuidadosamente diseñada para combinar el aprendizaje temprano del idioma con historias apacibles y personajes entrañables.

En un mundo donde los niños suelen ver el mismo episodio repetidamente (y sabemos que lo hacen), nos aseguramos de que cada repetición les enseñe algo nuevo, ya sea una palabra en otro idioma o una lección sobre la naturaleza, la amistad o la curiosidad. Por eso a los educadores les encanta, y los padres pueden respirar tranquilos al darle al «play».

A diferencia de las generaciones anteriores, que solo accedían al contenido en la televisión tradicional, tener contenido disponible cuando y donde quieran es la norma para los niños de hoy. ¿Cómo cree que la evolución del streaming ha cambiado el negocio de la distribución de contenido infantil?

El streaming ha democratizado el acceso: los niños pueden ver lo que quieran, cuando quieran, lo cual suena ideal… pero también significa que el filtro de calidad es más débil que nunca. De repente, el algoritmo se encarga de la supervisión. Eso da un poco de miedo.

Esto hace que marcas de confianza como StoryZoo sean aún más esenciales. Los padres necesitan saber que lo que sus hijos ven es seguro, apropiado para su edad y enriquecedor. El streaming también nos permite llegar a familias de todo el mundo y adaptar el contenido a idiomas y regiones específicas, lo cual es perfecto para nuestro modelo de aprendizaje de idiomas.

En este sentido, ¿con qué plataformas y territorios trabajan actualmente? ¿En qué regiones ven el mayor potencial de crecimiento para su contenido?

Trabajamos con diversas plataformas (streamers, emisoras y aplicaciones educativas) en Europa, Latinoamérica y, cada vez más, en Asia y África. Nuestro contenido prospera en regiones multilingües donde se valora mucho el aprendizaje temprano del inglés, o de la primera lengua.

Vemos un enorme potencial en el Sudeste Asiático, Europa del Este y Oriente Medio, donde los padres buscan contenido que combine entretenimiento con un verdadero impacto educativo. Y a medida que el tiempo frente a la pantalla se vuelve más común, incluso en zonas rurales, la demanda de calidad no hace más que crecer.

¿Cómo ve la evolución del contenido infantil y del público más joven en los próximos años?

Nos encaminamos hacia una generación más digital, más global y con mayor conciencia emocional. Los niños de hoy no solo miran, sino que interactúan, aprenden y forman visiones del mundo a partir del contenido que consumen. Por lo tanto, es nuestra responsabilidad ofrecerles algo reflexivo, diverso y adecuado para su desarrollo.

Creemos en fomentar las habilidades lingüísticas, sí, pero también la curiosidad, la amabilidad y la comprensión cultural. Estos no son solo espectadores, son futuros ciudadanos. Si eso no merece lo mejor que podamos ofrecer, ¿qué lo merece?

¿Algo más que le gustaría agregar?

Los niños merecen lo mejor de nosotros. Puede que no sepan expresar qué significa «contenido de calidad», pero sin duda saben cómo les hace sentir y qué les impacta. Es fácil subestimar la inteligencia de los niños, pero son mucho más perceptivos de lo que creemos.

Por eso, en StoryZoo, no tomamos atajos. Creemos en educar a través de la alegría, en empezar desde temprano con la exposición al lenguaje y en tratar cada contenido como algo que puede moldear la mente de los niños. Porque un día, estos niños dominarán el mundo, y nosotros solo estamos aquí para darles un buen comienzo (y quizás una canción pegadiza que se les quede grabada en la cabeza).

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