Pepón Montero y Juan Maidagán, creadores de Justo antes de Cristo, adelantan a ttvnews la segunda temporada de la serie y opinan sobre el presente de la comedia española.

Hace 15 años Pepón Montero y Juan Maidagán crearon en conjunto las bases de una comedia  con episodios de 25 minutos y ambientada en la época de los romanos. Si bien el proyecto desfiló por todas las cadenas de la época, y recibió comentarios positivos, ninguna lo encargó.

Hoy, 15 años después y con la irrupción de las plataformas, la serie se apresta para estrenar su segunda temporada.

Es que Justo antes de Cristo es seguramente una de las series que mejor reflejan el nuevo escenario de la producción de series en español. Un proyecto «imposible» hace apenas unos años y que hoy, pese a la «rareza» de ser una comedia de romanos española, llega al mercado con total naturalidad.

«Para nosotros ha venido Dios a vernos con Movistar porque llevábamos años con la serie en un cajón y se han atrevido a hacerla. Si ves todas las comedias que tienen son atrevidas, ojalá mantengan esto porque en la comedia hay que atreverse», opinó al respecto Pepón Montero, cocreador de Justo antes de Cristo.

«Esta serie la teníamos escrita desde hace años, pero no había manera de sacar adelante una comedia de 25 minutos y demás, porque hace unos años no la quería nadie. Ahora sí es un momento en el que este tipo de proyectos salen adelante y además se pueden hacer con bastante mimo», añadió Juan Maidagán, cocreador de Justo antes de Cristo.

La serie se estrenó originalmente en abril del 2019. El próximo viernes 13 estrena su segunda y última temporada, una decisión tomada casi desde el inicio del proyecto.

«Cuando planteamos la serie no queríamos hacer una serie de temporada, tras temporada, tras temporada. Siempre pensamos en terminarla aquí. Que el conflicto de Manio, el honor, el conflicto con su padre, todo eso se resolviera en esta temporada», explicó Montero.

«Sí que es verdad que conforme fuimos escribiendo y rodando y conociendo a los personajes con los actores surgió una posibilidad de llevar a una tercera…», agregó, aunque aclaró que se trata más de un ilusión que de un plan concreto.

«Realmente aquí termina…Desde el principio tenemos la historia con este arranque y este final», completó.

¿Y qué esperar de esta nueva temporada? Ambos coinciden en que se trata de una entrega más «explosiva» y «disparatada».

«Al haberlas escrito seguidas como que cada vez quieres ir un poco más allá. Y según vas llegando a los últimos capítulos vas de alguna manera centrándote en cosas nuevas, que no has hecho en los primeros», opinó Maidagán.

«Si llegamos a haber escrito otra temporada habría sido ya demencial», agregó.

«La segunda temporada realmente es como la evolución natural de la primera. Tiene mucha continuidad y todo lo que se sembró en la primera en cuanto a conflictos de personajes de alguna manera culmina, explota, en la segunda», señaló en tanto Montero.

«Por eso la segunda es mas explosiva porque realmente todos los personajes resuelven sus conflictos de una manera un tanto disparatada porque al igual que los conflictos van creciendo el disparate también va creciendo», terminó.

Codirigida por Nacho Vigalondo (Colossal, Los cronocrímenes) y Pepón Montero, Justo antes de Cristo es una producción de La Terraza Films para Movistar+.

La comedia es protagonizada por Julián López, Xosé Touriñán, Cecilia Freire, Priscilla Delgado, Eduardo Antuña, César Sarachu, Aníbal Gómez, Manolo Solo y Marta Fernández Muro y narra las peripecias de un niño bien de la época Romana, empeñado en pasar a la historia con unos honores que no se corresponden con sus habilidades.

Al elenco de la primera temporada se une en esta segunda el mítico Fernando Esteso y Raúl Cimas, ambos haciendo una colaboración especial. El humorista Pepín Tre repite también en su rol más tracio.

Sinopsis:

En la segunda temporada de Justo antes de Cristo, la vida se le complica aún más a Manio Sempronio. La Guerra Civil, asesinatos, secuestros, la gripe -que viene fuerte ese año-, los tracios, las tracias, espías, maridos suspicaces, bardos, un gigante, un augur chocho, Marco Antonio -también un poco chocho-, Octavio, un tío que se parece a Hitler, extraterrestres… Un lío.

Al final, tendrán que poner orden los dioses y Manio podrá ajustar cuentas con su pasado y con su padre, «El Magnífico».