El distribuidor ha vendido el drama rumano Vlad, los dramas turcos The End y Bitter Sweet Life y el drama ruso Trotsky, a varias plataformas y canales en el territorio.
El distribuidor internacional Eccho Rights anunció una batería de acuerdos para cuatro series dramáticas internacionales con plataformas en Corea del Sur.
Vlad de Pro TV de Rumanía y The End de los productores Ay Yapim en Turquía, han sido elegidos por un nuevo canal especializado en contenido euroasiático, mientras que Bitter Sweet Life, un éxito turco de Sürec Film, fue adquirido por Mint Media Group.
Completando esta última ronda de ventas en Corea del Sur está Trotsky, el drama histórico de Sreda Production Company en Rusia, que ha sido adquirido por Catch On.
Vlad se convierte en la primera serie rumana en ser retransmitida en Corea del Sur, con las tres temporadas adquiridas del resbaladizo thriller que ha demostrado ser un gran éxito para Pro TV desde su lanzamiento inicial en febrero de 2019. La tercera temporada se estrenó a principios de este año en Rumania, una vez más ganando elogios de críticos y espectadores.
The End ha disfrutado de éxito mundial. El primer drama turco que se emitió en Europa occidental cuando se vendió a SVT de Suecia en 2013, desde entonces la serie se ha vendido a emisoras en más de 50 territorios, así como a Netflix en un acuerdo global.
Bitter Sweet Life es una serie dramática de la escuela secundaria que fue un gran éxito de audiencia para Star TV en Turquía en 2018. La serie será doblada al coreano por Mint Media Group, con el objetivo de dirigirse a una amplia gama de espectadores y edades en la plataforma familiar.
Trotsky es un drama de época sensacional, que representa la vida y la desaparición de Leon Trotsky, el revolucionario que terminó con su vida huyendo de su antiguo aliado Stalin. La serie es el primer título ruso adquirido por Catch On a medida que la plataforma continúa ampliando su oferta internacional.
“Corea del Sur es conocida mundialmente como un gran país de origen para series dramáticas, pero también hay sed de que las emisoras importen nuevo contenido internacional al país. Hemos visto que el interés en el drama turco continúa creciendo y ahora hay una creciente demanda de una diversidad aún mayor, algo que estamos encantados de poder ofrecer en forma de series de alta calidad de países previamente sin explotar, como Vlad de Rumania y Trotsky de Rusia», dice Deborah Youn, directora de Negocios de Asia de Eccho Rights.