Diego Guebel, presidente de BoxFish, detalla a ttvnews el éxito del reality diario El gran premio de la cocina por El Trece en Argentina además de adelantar nuevos proyectos, entre los que figura el rodaje de un documental para Amazon Prime Video.

Fundada en 2017, BoxFish es una productora de TV con sede en Madrid, Buenos Aires y San Pablo.

En España, BoxFish ha producido más de 10 formatos entre los que se destacan Bake Off, Héroes, más allá del deber, El jefe encubierto y Dame veneno, entre otros.

En entrevista con ttvnews, Diego Guebel, presidente de BoxFish, comparte detalles del exitoso reality El gran premio de la cocina, que va por su octava temporada ininterrumpida por la pantalla de El Trece en Argentina.

Además, el experimentado ejecutivo, adelanta nuevos proyectos, entre los que figuran nuevos formatos de entretenimiento y el rodaje de un documental para Amazon Prime Video.

¿Cómo surge BoxFish?

La productora surge cuando estoy cerrando mi historia en Brasil donde estuve seis años dirigiendo un canal de TV (Band), y ya Edi Walter -que manejaba en su momento 4K, Eyeworks España y Warner España, me planteo que se quería ir-, y arrancamos la productora en España. Yo me fui a fines de 2017 y en enero de 2018 asumí la responsabilidad de BoxFish, pero enfocado en Argentina donde vivo. En agosto empezamos con El gran premio de la cocina en El Trece.

Fue el primer paso de BoxFish en Argentina…

Fue el primer formato propio en Argentina. Nunca habíamos producido para la tarde, pero en El Trece, tanto Adrián Suar como Pablo Codevilla, tenían claro lo que querían. Hicimos cocina diaria prácticamente en real time. El desafío era inventar algo que pudiera ser hecho en esos parámetros. Con la productora era importante empezar con el pie derecho. Trabajamos muy tranquilos, con mucho apoyo del canal, mucha libertad.

¿Cómo fue esa experiencia de El gran premio de la cocina?

Antes podías empezar un producto que se iba puliendo en la medida que arrancaba. Nunca de la manera idealizada que dice la gente. Este trabajo siempre fue así. En ese sentido, me sigue gustando el dar examen todos los días. Si un producto deja de funcionar tres meses, se va. No hay mucha vuelta. Funciona o no funciona. Es la meritocracia del producto que funciona o no funciona. En ese sentido, desarrollar un formato desde cero es un placer, porque después de un año o año y medio de consolidarlo, tenés un producto que podés llevar a otros lados que es lo que empezamos a hacer ahora.

Ese es el movimiento que está haciendo BoxFish ahora, mostrar el formato…

Y porque pasa lo mismo que cuando comprás un formato. ¿Por qué compras un formato? Ya funcionó. Ya se equivocaron. Te venden el know how. Es algo que tiene un circuito hecho. Básicamente ese era el objetivo. Ya hicimos más de 450 programas y no paró de crecer y funcionar.

¿Cómo es el reality?

Es una competencia de cocina prácticamente en real time donde comienza como una competencia entre grupos y termina en una final entre individuos. ¿Qué es lo diferente en relación a otros programas de cocina del estilo MasterChef? No se busca lo sublime. Acá se buscan platos más del día a día. Es un programa donde no se pretende que salga alguien con tres estrellas Michelin. Es sobre la pasión que tiene la gente por la cocina. Por otro lado, está el desafío de hacer un programa como este dentro de lo que son los presupuestos de los programas que están en la tarde. En este caso, queríamos hacerlo en el canal, que sea un programa sustentable y la apuesta salió bien.

El gran premio de la cocina

¿Hay nueva temporada para El Trece?

Sí. Ya está al aire. El programa desde que empezó nunca paró. Cada temporada termina un viernes y sigue el lunes.

¿Cómo se resuelve el tema de las grabaciones en plena pandemia y endurecimiento del aislamiento social en Argentina?

Primero siguiendo el protocolo que hizo la Secretaría de Medios. Luego el protocolo de la Capit (Cámara Argentina de Productoras Independientes de Televisión) y Satsaid (Sindicato Argentina de Televisión, Servicios Audiovisuales y Datos). Se trabaja con menos gente, se respetan las distancias, todo lo que es remoto se hace remoto.

Este casting se hizo con exparticipantes y trabajando bien ordenado se puede hacer. Entendiendo que esto es algo que está pasando en otros lados. No es que estamos trabajando en una mina de carbón que se está por derrumbar. No somos mejor ni más especiales que otros. Los cuidados son los mismos. La necesidad de la gente que tiene que bancarse una cuarentena de poder y tener cosas para ver es importante. No hay nadie que pueda quedar cuerdo si lee o ve todo de una pandemia. Desde los medios tenemos la obligación de dar entretenimiento para llevar una situación que es básicamente insoportable.

¿Qué otros proyectos tiene BoxFish en desarrollo?

Estamos haciendo un documental con Amazon sobre Colonia Dignidad. Una colonia muy controvertida en Chile donde el factótum fue preso en Argentina. Lo estamos haciendo desde una mirada de cómo está esa gente hoy, cuáles son los conflictos en relación a un pasado innegable donde -en algún punto- son todos víctimas. El rodaje está interrumpido por tema del Covid. Suspendimos cuando volvimos a rodar a Chile. Ya se había grabado en Alemania y Santiago. Estábamos grabando en Colonia y en Buenos Aires. Todavía queda bastante por grabar.

También estamos preparando Family Feud para El Trece. Es un formato de Fremantle, que acá se llama 100 argentinos dicen; y estamos con dos proyectos más, uno para la TV Pública y el otro no puedo decir nada. En Brasil estamos grabando un especial de Covid en conjunto con Omava -amigos de toda la vida-, probablemente para A&E o Bandeirantes. Siempre es importante crecer en el mercado de base de uno. Nunca creí en ser una productora de exportación. Eso es servicio. Si vos querés crecer, generar propiedad intelectual, tenés que tener mercado, que es lo que estamos haciendo acá.

¿Existe interés para el desarrollo de ficción en BoxFish?

Puede ser, pero el foco nuestro es el entretenimiento y el documental, que fue lo que hice yo en toda mi carrera. No quiere decir que no pueda pasar que me enamore de un libro y me den ganas y lo podamos desarrollar. Pero no estamos armando una línea de seis desarrollos previendo los próximos cinco años. Nuestro norte es el entretenimiento de alta calidad.

Teniendo en cuenta tu experiencia en varias áreas de la industria, ¿cuáles son los desafíos de las productoras independientes y la TV en la actualidad?

El desafío para una productora es traer a la mesa lo que es difícil desarrollar en un canal por la propia lógica de desarrollar las ideas en un canal. El rol de las productoras es acercar al canal lo que necesita o algo novedoso. No es muy diferente a los streamers que producen poco y donde las productoras son las que llevan el producto que no se genera adentro. Cambia el comportamiento de la gente. Es importante entenderlo más que cuestionarlo. No hay ninguna duda de lo que es la tele. Sigue siendo una compañía.

¿La TV sigue estando firme?

Cambió un poco el comportamiento en el prime time. Las abiertas se repiensan. Es muy difícil imaginarse hoy una ficción de alta calidad en el prime time de una TV abierta. No es difícil imaginarse que haya un reality de alto vuelo. Lo que no cambia es que la gente quiere seguir viendo contenido. Es un tema de que el productor esté bien ubicado y entender lo que pasa alrededor. Si un productor se confunde y lleva una ficción de alta calidad a un canal… Probablemente les cueste -salvo en un esquema de coproducción- ponerlo al aire. Después están las particularidades del mercado. Hay algo mal que pasó en Argentina -a diferencia de Chile, Perú, Colombia, Brasil y México- y es que nos quedamos con cero novelas al aire.

¿Cómo ves está situación y el caso Polka en Argentina como presidente de Capit?

Hay algo que yo no lo termino de identificar y que nos salió bien, porque no todos los países que hacen novelas son países más ricos que la Argentina. Argentina tenía tres o cuatro tiras por día. No es posible que no se pueda. Hay algo en la industria que se tendrá que repensar para ver cómo se llegó a esto, cuáles son los impedimentos. Si es que somos ineficientes para grabar un producto de manera diaria.

Es una particularidad local. No pasa en el resto de los países. Yo creo que no estamos a la altura de lo que podría ser la tele acá. Lo digo pensando en el prime time. En relación a nuestro tamaño podríamos estar mejor. Yo creo que las crisis económicas tan seguidas fueron limando a todos.

¿Cuáles son los próximos pasos de BoxFish?

Empezamos a movernos con este formato viendo si lo movemos nosotros o a través de una alianza internacional. El formato que estamos pensando para la TV Pública es un formato pensado para exportar. Siempre pensamos a la productora como una fábrica sofisticada de propiedad intelectual de TV. Nuestro pensamiento para adelante tiene que ver con eso y con los mercados de Argentina, Brasil y España, porque en cualquiera de estos países trabajamos cómodos.

¿Cómo te has adaptado a esta nueva normalidad?

No me adapté y tampoco me quiero adaptar. Quiero volver a viajar, que vuelva la vida anterior. Lo que se puede ver online, se ve online; pero el contacto físico no sé si es irremplazable, pero me gusta.