La OTT busca un pedazo del pastel del fenómeno turco con la creación de un hub de producción en Estambul y la puesta en marcha de hasta 10 proyectos originales.
A mediados de enero de este año, Netflix abrió su primer oficina local en Estambul. Y este mismo año, la OTT piensa ampliar el proyecto con un ambicioso hub de producción en Turquía del que saldrán numerosos contenidos originales.
La noticia fue revelada a Variety por la directora de contenido original de Netflix en Turquía, Pelin Distas, quien anunció además hasta 10 proyectos originales.
Destacan entre los mismos Hot Skull, ambientada en un Estambul postapocalíptico tras una extraña pandemia; The Club, sobre un club nocturno de Estambul en los años 50′; la serie sobre crimen Fatma; o la serie de ciencia ficción Midnight at the Pera Palace.
También aparecen la serie de aventuras Butterflies, ambientada en un submarino; el drama The Uysals; o la sitcom Ersan Kuneri.
Los clásicos dramas turcos, tan populares en la TV de todo el mundo, brillan por ahora por su ausencia en la estrategia local de Netflix.
«Las series turcas han sido populares en los últimos años, pero nosotros contaremos nuestras historias de un modo diferente», explicó Distas a Variety, quien detalló tres grandes diferencias: la duración de los episodios (en Turquía suelen durar hasta dos horas), la cantidad de episodios (los dramas turcos suelen tener hasta 35 por temporada) y los temas y el estilo narrativo.
La apuesta de Netflix por Turquía se suma al hub de producción que ya estableció en España y a los 500 millones de dólares que destinará este año a Corea del Sur, entre otras varias iniciativas internacionales.