Según el New York Post las primeras ofertas no superan los 20.000 millones de dólares, menos de la mitad de los 49.000 millones pagados por AT&T en 2015.
Cinco años después de haber adquirido Directv por 49.000 millones de dólares, AT&T parece decidida a desprenderse de la operadora satelital, aunque ello signifique asumir una millonaria pérdida.
Es que según publica el New York Post, AT&T habría convocado una puja de interesados por la operadora de TV paga y las primeras ofertas no superarían los 20.000 millones de dólares.
Según detalla el medio estadounidense, las mismas se colocan en «apenas» 15.750 millones, menos de un tercio de lo pagado hace cinco años.
La información detalla que Dish, principal rival de Directv, no está participando de la subasta, liderada por fondos de inversión como Apollo y Platinum Equity Partners.
Actualmente, Directv tendría unos 14,3 millones de suscriptores, una cifra que no para de bajar trimestre a trimestre debido a la aparición de múltiples plataformas de streaming y la aceleración del cord-cutting.
El reportaje del New York Post no detalla si las ofertas incluyen las operaciones de Directv Latin America.
Este es el segundo reportaje en poco tiempo que apunta en la misma dirección: en agosto el WSJ había avanzado que AT&T busca desprenderse de Directv.